Si quiere dotar a una habitación un aire veraniego una buena opción es optar por un esquema cromático donde los protagonistas son el blanco y azul, un dúo que destaca en la decoración de este dormitorio. Un espacio fresco y luminoso, en el que la sencillez se apodera de la atmósfera.
Los detalles naturales, como la alfombra o un taburete de mimbre, materiales que evocan la naturaleza, crean un ambiente acogedor y con un toque natural. Estos accesorios aportan personalidad, como un frasco de cristal que contiene una vela y arena, es un simple detalle ideal para sumar calidez al dormitorio.
La cama se ubica sobre una tarima de madera, del tipo japonés y que permite dormir a la altura del suelo, este diseño despojado le otorga un guiño más de simpleza a la estética de este espacio. Vestida con textiles que combinan patrones de flores y rayas, crean un conjunto delicado y actual.
Las paredes blancas encuentran como punto focal la carpintería pintada de azul, una apuesta que añade un efecto veraniego, que evoca las típicas viviendas del mediterráneo. Una habitación inspirada en el verano, en su frescor, sus tonos, su aire, sencilla y práctica, confortable y con estilo.
dormitorio con deco de verano
Foto Decoracion: chic-Decó