Las rayas se imponen nuevamente en la decoración de interiores, con ellas es posible crear divertidas composiciones donde además el color es protagonista. En esta propuesta se ha logrado una combinación de diseño y tonos que realzan la belleza de este interior.
Las rayas son un patrón que permite ganar amplitud en una estancia, pues con las rayas verticales la habitación luce más alta, mientras que las horizontales dan una sensación de que es mas ancha.
En este dormitorio las paredes se visten de rayas y se les ha asignado una función atractiva: son las encargadas de crear diferentes zonas gracias a los colores que se han elegido.
La habitación se divide en dos grupos de rayas horizontales, por un lado blanco y rosa para el sector femenino, mientras que otras dos paredes se han pintado con una inspiración en el estampado navy con rayas blancas y azules, para la zona del niño de la casa. Una apuesta atrevida para un dormitorio infantil o juvenil.
Con esta idea se logra sectorizar la estancia, añadir alegría y personalidad a su estética.
Fotos Decoracion: desiretoinspire