Cuando nos quedamos embarazadas surgen mil y un preparativos que tenemos que tener en cuenta antes de dar a luz: tener preparados los muebles, comprar ropa para el pequeño, buscar el carro… Pero además de estos pequeños detalles, también tenemos que tener en cuenta que nuestra vivienda necesita algunos cambios. Por eso, hoy te damos algunos consejos para preparar la habitación del bebé.
• No debe faltar. Son muchas las cosas que hay que comprar para un recién nacido, pero para que no lo notemos en nuestra economía debemos ir adquiriéndolas poco a poco. Sin embargo, dos de los muebles imprescindibles que no deben faltar en una habitación de bebé son la cuna y el cambiador. La mejor opción es apostar por una cuna convertible con el paso del tiempo en cama; éstas suelen tener a los pies un cambiador y varios cajones para los accesorios.
• Pañales ordenados. Junto a la cuna y cambiador precisamente no deben faltar nunca los pañales; pero para que sean accesibles y se pueda recurrir a ellos fácilmente, nada como tenerlos ordenados. Existen dispensadores, pero también dedicar un cajón a guardarlos o simplemente tener tu propia caja o cesta con todo lo necesario para el cambio de pañal. También puedes poner una pequeña papelera junto al organizador de pañales para que puedas echar ahí los usados y recogerlos al final del día.
• La bañera no es imprescindible. Aunque más tarde o más temprano tendrás que hacerte con una, recuerda que la bañera no es lo más imprescindible antes de la llegada del bebé. Pasarán varios días hasta que puedas bañarlo, ya que hasta que el ombligo no esté curado no podrás utilizarla.
• Cómoda VS armario. Si no sabes cómo decorar la habitación de bebé o cuentas con un cuarto muy pequeño, te recomiendo que optes por una cómoda en vez de comprar un armario. Puedes utilizar la parte superior como cambiador del bebe, ocupará mucho menos espacio en la habitación y te cabrá de sobra toda la ropita del bebé. Sin embargo, invirtiendo dinero en un armario podrás guardar en él todas las prendas que tengas que colgar cuando sea más mayor.
• Elección de la ropa. Y como decíamos, es necesario organizar la ropa del futuro bebé. Cuando la compres o te la regalen, debes ordenarla de forma cómoda para encontrarla cuando ya esté el recién nacido en casa. Recuerda que debes calcular el tipo de climatología hará según la talla que elijas; es decir, si compras ropa de talla de 9 meses y va a nacer en marzo, tendrás que comprar algo abrigado para el invierno.
• Pintar la habitación. ¿No sabes cómo pintar la habitación del bebé? A nosotros nos encanta esa combinación de gris y rosa, pero también elegir otros tonos más neutros o pasteles. Lo importantes es que haya mucha luz en la habitación y que de sensación de amplitud. También puedes apostar por técnica 60 30 10, en la cual pintar de tres colores diferentes según estos porcentajes. Otra forma sencilla y barata de personalizar una habitación es hacerlo con vinilos para niños; existen todo tipo de dibujos, colores y modelos.
• Dos tipos de cortinas. Uno de los elementos decorativos de una habitación son las cortinas, y en el caso de un cuarto para un recién nacido, es importante que con éstas se puede regular la intensidad de luz. Ya que el bebé dormirá tanto por el día como por la noche, es recomendable contar con unas cortinas tanto tupidas como más claras. Coloca estas últimas en el centro y las tupidas a ambos lados; así conseguirás ‘jugar’ con la luz natural que entre en la habitación.
Vía Laura Crusellas, de Letsbrico.com