Un ambiente aireado y luminoso, suele ser la mejor alternativa para cualquier habitación de una casa, pero esta situación ideal no es la que se repite en todas las casas, por ello, veremos a través de viviendas reales, cómo iluminar la cocina con luz natural.
Una entrada de luz natural se puede crear de diferentes formas, con ventanas, paneles de cristal, ladrillos de vidrio o pavés, en todos los casos es conveniente una carpintería o cerramiento con correcta aislación, además de buscar en lo posible, la mejor orientación, para ganar mayor luminosidad en el ambiente.
En la primera imagen la solución para iluminar la cocina se ha incorporado cristal en parte del techo y tres muros, con un corte que respeta las simetrías, siguiendo la línea desde las paredes. Esta es una propuesta ideal para un ambiente minimalista, y una forma de bañar con luz natural, la cocina, sumando estilo y una estética moderna.
Otros recursos para iluminar un espacio, son los lucernarios y claraboyas. Este sistema se emplea para ganar luminosidad en un ambiente, pero dependiendo de la altura en la que se encuentran, no se los use para ventilar, pues se trata de paneles fijos de vidrio o materiales plásticos.
En todos lo casos es importante procurar que la fuente de luz esté orientada sobre todo hacia áreas de trabajo en la cocina. Como por ejemplo, una encimera, la zona del lavabo o una isla de cocina.
Una opción que permite inundar con luz natural una cocina, es reemplazar muros de concreto por paredes acristaladas, de techo a suelo, y las paredes se cubren de cristal, y algunos paños podrían funcionar como ventanas, de modo de mejorar la ventilación de la estancia.
En este caso, cuando las paredes se reemplazan por vidrios, además de iluminar la cocina presentan la posibilidad de integrar exterior e interior, permitiendo amplias vistas de las zonas al aire libre de la casa, sean jardines o patios.
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Fotos Decoracion: remodelista