Blanco en la Cocina

Elegantes, modernas, amplias, sobrias, estrechas, el blanco se adapta a todos los estilos y tipos de cocinas en casas y apartamentos contemporáneos. En su amplia gama de opciones cromáticas el blanco abre un juego extenso y atractivo de propuestas para decorar interiores.

El blanco es un color que permite añadir efectos diferentes a un ambiente, pertenece a los neutros y es muy versátil. En la cocina es perfecto para dotar a esta estancia con una sensación visual de limpieza y asepsia.

Es posible aplicarlo a diferentes superficies que integran esta estancia, superponer texturas en distintos tonos de blanco y matizarlo con pinceladas de colores fríos o cálidos.

En la encimera apostando a los materiales clásicos como el mármol o el granito, o a los más innovadores como es el Silestone, En el pavimento y el alicatado de las paredes, que pueden ser de madera o de mosaicos, en los complementos decorativos como lámparas o los electrodomésticos, son algunas aplicaciones de este noble color.

Para los muebles de cocina blancos también hay diferentes materiales entre los cuales escoger, madera lacada, MDF, la madera clásica con patinas para darle un efecto vintage y acogedor.

Tanto en una pequeña cocina como en una que se desarrolla en un espacio generoso, el blanco se puede convertir en un protagonista del esquema cromático. Con esta opción se consigue que los interiores parezcan más amplios, se incrementa la luminosidad, pues la luz que entra a la estancia se refleja sobre las superficies claras, además es ideal para sumar una aire de pulcritud y delicadeza a la decoración.

Para completar la paleta de colores en la que predomina el blanco, acompañarlo con cualquier color puede dar resultados atractivos. Blanco y negro, en un suelo de damero, el suelo de madera que ofrece calidez y elegancia rompe con la frialdad del blanco puro, mientras que un efecto semejante se consigue aportando diferentes texturas al ambiente en tonos neutros.

Los colores pasteles en los textiles y accesorios de cocina, luminarias de diseño industrial con diseños que incluyen el brillo del metal y los acabados cromados, incluso la frescura de las plantas y flores, un murete revestido con papel decorativo, unas teselas de mosaicos de vidrio en el frontal de la encimera son otras alternativas para sumar un toque de color y dinamizar la estética de una cocina en la que el blanco es la estrella.

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