La decoración de una oficina puede hacer que un espacio que a veces tiene una estética descuidad y hasta aburrida, se transforme completamente en un ambiente acogedor y agradable.
Elegir un esquema de colores para nuestro espacio de trabajo es una buena idea y un punto de partida para crear una atmósfera estimulante, ideal para realizar las actividades propias de un ambiente de estudio o de trabajo.
En esta pequeña oficina la decoración se viste de rosa y blanco, creando una habitación con un guiño romántico y femenino.
El mobiliario se ajusta al espacio disponible, y tratándose de un rincón acotado se escogió un escritorio de pequeño formato, que tiene una estilo clásico y con acabado blanco, la igual que un estante volado que sirve como práctico lugar de guardado en este despacho.
Paredes y muebles blancos encuentran el contrapunto en el color rosa, que está presente en distintos accesorios decorativos y que destaca en la pintura de una silla clásica de madera.
Se suman elementos al ambiente que aportan personalidad y un carácter único, todo lo que se necesita para hacer que un espacio nos envuelva en una agradable atmósfera.
Foto Decoracion: http://coisitaslove.tumblr.com/