Una oficina en casa puede gozar de la misma decoración con estilo, como si se tratase de cualquier otra habitación de una casa. A continuación conoceremos algunas formas de cómo decorar un despacho en blanco, una alternativa que puede adaptarse incluso a escritorios u otros espacios de trabajo.
Ideas para decorar un despacho
El blanco puede usarse tanto por una cuestión de preferencias, como así para aprovechar este color, o también conocido como “no color”, que funciona como un beneficioso recurso en la decoración de espacios pequeños o carentes de luz natural o poco luminosos.
- Un espacio de trabajo, oficina o despacho puramente blanco puede sumar carácter y nuevo estilo en su decoración con unos pocos elementos, sin recargar el ambiente, elementos que al mismo tiempo sirvan en la tarea que se desarrolla en ese espacio.
- El escritorio o mesa de trabajo, puede ser una antigua mesa blanca con un acabado decapado, el que aporta textura al ambiente, la misma idea puede aplicarse a un silla, un estante, librería u otro mueble que se encuentre en el despacho.
De este modo, se puede crear un conjunto especialmente personalizado para un despacho con una Decoración en Blanco sobre Blanco.
- Una lámpara de mesa es perfecta para una iluminación puntual de esta zona de trabajo, y la iluminación natural bien aprovechada, desde unas ventanas a cada lado del escritorio, que inundan de luz y claridad al blanco despacho.
- Un cuadro inspirador en la pared en la que se apoya el escritorio, o bien un práctico panel de corcho, resultará un útil elemento que permita tener a la vista, notas, recordatorios y algún bonito detalle, que a la vez añade un toque dinámico y alegre a la decoración de una de las paredes del despacho.
- Por último, para reunir objetos que se utilicen en la actividad laboral, o en el estudio, unas cestas o canastas de tejidos vegetales son una opción que aporta calidez y funcionalidad para decorar un despacho en el que destacan los acabados en blanco.