Esta idea simple y romántica para la mesa de noche es perfecta para componer una atmósfera agradable y con personalidad, a través del frescor de las flores y algún detalle decorativo que aporte belleza y un marco acogedor al dormitorio.
Se trata de una propuesta bien sencilla y fácil de realizar, el principal accesorio son las flores, un elemento natural que permite contagiar vida y alegría al interior. Escoge aquellas flores de temporada que más te gusten, con agradables y suaves aromas para que acompañen su estancia en el dormitorio, e inunden con sus perfumes el ambiente. Puedes usar incluso flores cortadas de tu propio jardín, para llevar su belleza al interior del hogar.
Para completar una composición bien atractiva el toque de acierto es elegir unos recipientes con delicados diseños y texturas. Pueden ser piezas de cristal, loza o porcelana, como en el caso de la imagen que se ha creado un atractivo arreglo con cuencos y una jarra, esa mezcla de diferentes formas y diseños añade dinamismo a la decoración.
Repartir las flores en distintos recipientes, otorgando alturas y volúmenes variados, combinando colores en la misma gama, permitirá dotar al interior con un guiño delicado y refinado. Habrá que renovar el agua de las flores para que se mantengan para poder conservarlas por varios días, y escoger preferentemente aquellas con suaves aromas para que no resulten agobiantes sobre todo durante las horas de la noche, de ese modo conseguiremos dotar a la habitación con una exquisita fragancia y frescura.
Las flores, aportan una nota natural a la mesa de noche, un mueble que enmarca la cama y que puede ser tan funcional como decorativo. Por ello además de elementos que resulten prácticos tener a mano junto a la cama, como es una lámpara de mesa y la lectura del momento, también puedes sumar un pequeño ramo de flores.
Foto Decoracion: brabournefarm