Muchas viejas naves industriales se han transformado en modernos lofts, en viviendas que cuentan con todas las comodidades que exige la vida actual pero que conservan la impronta fabril original. Esos viejos edificios una vez reciclados se pueden convertir en cómodos hogares, e incluso en algunos casos se emula esa estética para reproducirla en casas contemporáneas.
En este caso el espíritu industrial se hace presente en un luminoso salón actual que cuenta con un amplio ventanal, gracias al que se inunda de luz todo el interior y que ofrece unas interesantes vistas de la ciudad.
La pared de ladrillo a la vista añade calidez al ambiente y al igual que las tuberías de ventilación y las de iluminación, que se dejan ver por fuera de los muros, son elementos que acompañan el aire fabril de esta estancia. El dibujo que se forma con el ladrillo y su acabado rústico junto a la madera del solado, con sus encantadoras vetas naturales, crean un conjunto que suma un toque acogedor a este interior.
Los muebles de diseños con maderas claras y líneas simples añaden una estética actual mientras los textiles suman texturas naturales a la decoración.
Foto Decoracion: 4himglory